El productor hidropónico Rafael Peña, conocido como “Don Lechuga”, afirmó en el programa «Solo para Mujeres» que se transmite por Zol 106.5, que cultivar en casa permite consumir vegetales más seguros, al controlar fertilización y plagas y reducir la exposición a químicos presentes en productos comerciales. “Eres dueño de tu salud”, sostuvo.
Peña explicó que las torres hidropónicas funcionan con un tanque de nutrientes y una bomba que recircula la solución por gravedad, sin tierra. El mantenimiento básico consiste en vigilar pH (5.5–6.5) y conductividad eléctrica para asegurar la absorción de minerales. Añadió que, aunque la lechuga prefiere 18–22 °C, la hidroponía permite producir en climas cálidos como el Gran Santo Domingo.
Para viviendas verticales, citó torres con huella menor a medio metro y 48 posiciones (12 niveles × 4), suficientes para mezclar hojas como romana, rúcula, albahaca o puerro (no combinar en la misma torre hojas con frutos como tomate o pepino por requerir soluciones distintas). Indicó que pueden operar indoor con luces de crecimiento cuando no hay sol directo.
Sobre ciclos y manejo, indicó que la lechuga puede cosecharse en 30-60 días (y “repollar” si se deja el cogollo), o cortar hojas de varias plantas y permitir que rebrote. Advirtió que si se deja florecer, amarga de forma natural. A gusto del consumidor, señaló que la romana puede percibirse con “dulcito” según su momento de maduración.
Peña insistió en el beneficio sanitario: al producir en casa, el cultivador evita residuos de insecticidas y decide cuándo y cómo proteger sus plantas. Como referencia de acceso, mencionó torres comerciales alrededor de RD$30,000 que incluyen los componentes básicos y son de instalación sencilla.
Concluyó que cultivar en casa con hidroponía, verduras frescas, limpias y de temporada, ahorra espacio, y disminuye la dependencia de cadenas con manejos químicos que el consumidor no controla.
